China secuestra a un empresario tibetano y derriba su vivienda y su negocio


Policía Armada en Tíbet
Un hombre de negocios tibetano, muy conocido y querido por apoyar activamente la cultura tradicional, podría haber sido detenido después de que su casa fuera derrumbada por funcionarios chinos.
Nangchen Tashi lleva una semana desaparecido, y algunas fuentes han comentado al exilio que, según se comenta, se lo llevaron las autoridades. Ya en 2010 fue retenido y torturado durante un breve espacio de tiempo. El pasado 12 de septiembre, un grupo de hombres chinos aparecieron a la puerta de su casa hacia la medianoche y le dijeron que tenían que echar abajo el edificio, sin más explicación. La familia, que se encontraba con él, protestaron indignados. Su mujer, Böde, sus hijos Sherab Dorje y Sonam Topgyal, y su hija, Yangdzom, fueron todos detenidos. Tras llevárselos, los chinos llegaron con bulldozers y echaron abajo la vivienda y un hotel anexo, propiedad de la familia.
Tashi, de 47 años, es conocido como un gran defensor de la cultura, religión e idioma del Tíbet. También es alguien muy generoso a la hora de ayudar a los más pobres y recaudar fondos para los tibetanos que quieren estudiar y mejorar su futuro.